Además de estar comprometido con la sostenibilidad
En nuestro artículo anterior, mencionábamos que la Fuerza de Ventas de nuestra organización debía de ser competitiva y estar alineada con los objetivos del negocio, para que este sea sostenible: Ahora nos toca comentar el rol que debe de asumir el líder de dicho equipo, el Gerente Comercial.
En el entorno actual, de mayor incertidumbre en los mercados, con un contexto competitivo, cambiante y exigente en cuanto a creatividad y búsqueda de nuevas soluciones, el Gerente Comercial debe asumir un rol excepcional, gestionando el potencial y el futuro de su equipo y colaboradores individualmente.
Las personas y los equipos que estas conforman, deben gestionarse en función de las metas que pueden alcanzar en el futuro y no solo a través del reto presente.
Para que las organizaciones sean exitosas, las personas deben contar con un entorno de gestión que propicie su desarrollo constante, porque solo a través de ese desarrollo individual del potencial y del talento de cada miembro de la organización, se alcanzará el desarrollo sostenible de esta última.
La gestión de equipos mediante la motivación por superación y la ayuda a emprender ese camino de forma individual, sí genera compromiso y tenacidad. Y no exclusivamente para realizar las tareas actuales, sino para aumentar la capacidad y competencia, haciendo posible que el individuo y el equipo alcancen metas aún más ambiciosas en el futuro cercano.
Del control y del seguimiento actual, el Gerente Comercial debe ser capaz de definir retos y exigencias futuras que motiven y permitan el crecimiento de cada uno de sus colaboradores, según sus potencialidades y talentos de cada uno.Es decir, el Gerente debe ejercer un rol que le permita gestionar personas y equipos en función de lo que son capaces de alcanzar en el futuro y no solo de lo que son capaces de hacer en el presente.
Además, debe de generar compromisos integrando inquietudes, necesidades y capacidades individuales en la gestión del equipo, integrando también diversidad de personas para conseguir, a través de esa suma de individualidades, el éxito del equipo. Esto solo es posible con una gestión hipermétrope, es decir con claridad, seguridad y planificación a largo plazo y no focalizándose exclusivamente en lo inmediato.
Resumiendo, para asegurar la evolución empresarial y la sostenibilidad buscadas por la Alta Dirección, el Gerente Comercial debe de ser: planificador, organizador, impulsor de individuos, coordinador de equipos, controlador-formador, creativo y promotor de rentabilidad.